Te pongo en situación.
Estaba yo llevando a cabo mi típica rutina de baño. Jazz de fondo (cosa que se da de cuando en cuando últimamente). Pensando en nada y en todo (porque cuando pensás en nada en realidad estás pensando en un montón de cosas juntas que se ordenan tan desordenadamente que parecen nada).
En eso, en la parte del enjabonamiento cuando hice un ademán para acomodar el reloj en mi muñeca derecha; reloj que no estaba ahí porque estaba atrasando tanto que no se justificaba seguir llevándolo solo de adorno.
De esto surge una idea...una necesidad imperiosa (bueh, capaz no tanto) de escribir. Abrí la puertita del anaquel de la ducha en la que guardo estratégicamente papel y birome, y me encontré con que esta última no estaba "pucha! la saqué para hacer crucigramas". Me desesperé. Terminé rápido de bañarme, me chanté la bata de baño y subí corriendo para escribir.
Y acá estoy. Escribiendo.
¿Qué quería escribir?
Algo sobre relojes, partes amputadas y cosas así...
Te sacás el reloj, pero la sensación sigue
dicen que perdés un brazo y de tanto en tanto te pica o algo así
cuando una persona se va, la seguís sintiendo de tanto en tanto
y tenés que recordarte que se fue.
Una persona muere, y lo mismo.
Hoy (06/11/17) me encontré con este borrador. Lo acomodé un poco, pero no agregué nada. No sé de cuándo será, supongo que del 2015. Lo publico porque de nada sirve tenerlo archivado, y lo publico porque guardado o liberado, probablemente nadie más que yo lo lea.
